El camino

Cuando nos invade la necesidad de crecer, no hay otro camino.
Sólo nos queda crecer. Aunque la duda nos ataque y en ese momento nos demos cuenta de que no tenemos todas las respuestas y que ni siquiera estamos cerca de tenerlas.

En ese momento deseamos no crecer, pero tambien queremos crecer, lograr cosas nuevas, saber de qué somos capaces y cada vez querremos llegar más lejos. Tan lejos como nos lo permita nuestra alma y nuestro espiritú.

Seguramente no sera fácil. Seguramente no sabremos que camino tomar. Encontraremos caminos largos, otros más cortos, algunos pedregosos y dificiles, otros con arenas movedizas o quizás barrancos. Pero sin recorrerlos no sabremos como son, y como dice Robert Frost, desafortunadamente no podemos tomarlos todos.

Decidete, no lo pienses más. Toma el mejor camino para ti. A la hora de tomar una decisión no sabras si es el mejor camino para ti, pero una vez lo escojas no habrá otro camino, así que sòlo por ello se convertirá en el mejor para ti. Eso sí, está siempre atento, preparate para lo que puedas encontrar, para enfrentar los peligros y para disfrutar de los paisajes y de las cosas buenas que te traerá ese camino.

Si alguna vez sientes que te estás saliendo del camino, retrocede un poco, recapacita y retoma tu camino, que al fin y al cabo es sólo tuyo.